Iglesia de la Asunción

Iglesia de la Asunción
¡Qué alegre es nuestro pueblo!

sábado, 9 de mayo de 2020

Marcha solidaria del 12 de mayo 2020





Desde nuestro sombrío y perenne confinamiento los enfermos neuroinmunes, afectados por FM, SQM, EHS, EM/STC, comprobamos como nuestros familiares, amigos, vecinos, compatriotas y habitantes de nuestro planeta sufren un encierro parecido al nuestro.

Apoyamos con fuerza y cariño la labor de todos los que aúnan esfuerzos para combatir la pandemia, salvar vidas y ofrecer su ayuda logística para que podamos comer y vivir preservados en nuestras casas.

Para nosotros, este encierro es casi nuestra forma de vida debido a nuestras dolencias, síndromes, enfermedades como queráis llamarles. Nuestro sufrimiento es tal que muchas veces quisiéramos huir de esta vida tan caótica y dolorosa. El dolor bestial corroe nuestro cuerpo entero, un dolor parecido al del alumbramiento, pero sin ninguna recompensa. Día tras día, año tras año.

Y si fuera poco, a pesar de la Fibromialgia, tenemos un agotamiento exhaustivo que a veces no nos deja ni vestirnos o realizar la más mínima de las tareas o entender cualquier complicación a causa de la Encefalomielitis Miálgica.

Añadidos a esta extenuación permanente y complicaciones cognitivas el Síndrome Químico Múltiple, es decir reacciones violentas a ciertos químicos nos produce a veces parálisis faciales, entumecimientos, ciertas hemiplejias, bajadas de tensión…

En cuanto a los que sufren Hipersensibilidad eléctrica tienen que vegetar de por vida en habitaciones blindadas contra las radiaciones electromagnéticas, sobrevivir de mala manera si no tienen recursos para encarcelarse con los materiales debidos o abandonar la vida terrestre.

Este pequeño esclarecimiento es muy básico. No hay libros ni tratados que pudieran dar una elucidación exhaustiva de estas cuatro enfermedades.

Muchos médicos y especialistas no están formado para atendernos o no conocen nuestras patologías. La sociedad nos tilda de loc@s y todos juntos nos encaminan al psiquiatra cuando está sobradamente verificado que nuestros síndromes son demostrables en análisis, radiografías y pruebas médicas.

Todos los años salimos a la calle para reivindicar nuestros derechos, reconocidos por la constitución, pedir formación gratuita de los sanitarios, unidades específicas en cada hospital de provincia y pensiones para los que ya no pueden trabajar.

Este año no podremos salir a manifestarnos os pedimos que os unáis a nuestra marcha virtual que tendrá lugar a través de las redes sociales.

Queremos dejar de ser invisibles. Tenemos derecho a una sanidad justa.

No hay comentarios:

Publicar un comentario